El confinamiento tras decretarse el estado de alarma en el mes de marzo sirvió en su momento para frenar la pandemia, si bien durante este periodo de crisis, las empresas han tenido que hacer frente a un enorme esfuerzo para poder seguir adelante. Una vez superado lo peor, la actividad económica ha vuelto a coger impulso aunque todavía queda camino por recorrer. En el caso de los talleres de reparación, el parón y la llegada del verano ha animado las visitas de los clientes de tal forma que la facturación creció en los negocios de reparación de vehículos un 118,9% en mayo, en comparación con abril, como consecuencia de la desescalada, según explica CSS en su blog.

Sin embargo, entre enero y mayo, los ingresos han caído el 30%, mientras en lo que se refiere a la comparación anual (de mayo de 2019 a mayo de 2020), el descenso ha sido del 50,3%, según los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Por eso, y teniendo en cuenta las posibles crisis generadas por nuevos rebrotes en los próximos meses, conviene que el taller elabore su propio plan de contingencia que pueda poner en marcha protocolos de actuación estratégicos…

En este contexto, la agencia de comunicación 3AW ha preparado un decálogo con buenas prácticas para llevar a cabo ese plan de contingencia que defina posibles escenarios, con el fin de que los negocios estén lo más preparados para afrontarlos…

  • Identificar los problemas o situaciones de riesgo de la compañía y las posibles soluciones
  • Planificar las actividades empresariales, concretando su alcance, las fases y estrategias a llevar a cabo, así como los grupos de trabajo, los roles y responsabilidades, recursos y objetivos
  • Determinar las estrategias y documentar el plan de contingencia y los planes derivados. Para ello, es imprescindible identificar los aspectos o áreas de la compañía más importantes para la continuación del negocio, puesto que las estrategias deben centrarse en esto, principalmente
  • Realizar las pruebas y ensayos necesarios del plan de contingencia. El objetivo es comprobar su correcto funcionamiento, puesto que, en caso contrario, el plan debe ser modificado
  • Asegurarse de que las instalaciones cumplen con las medidas sanitarias imprescindibles. Con el fin de asegurar la salud de los empleados y, si es necesario, adaptar los puestos de trabajo o apostar por el teletrabajo cuando sea posible.

(fuente: Posventa.info)